jueves, 26 de enero de 2017

¿Cómo justificar el aprendizaje de la lectura?

                                                                                                                                                                                                                       

Las destrezas en la lectura comprensiva y en la expresión ordenada y coherente del propio pensamiento, verbalmente y por escrito, son para el alumno garantía de éxito en todas las materias de enseñanza. Contribuyen a proporcionarle independencia, confianza en si mismo y una sólida base para su formación permanente una vez terminada la escolaridad, al tiempo que le convierte en un ciudadano más  informado, más creativo, más crítico y, en consecuencia, más libre. Porque cuando se lee un libro, de forma natural, intuitiva, apenas perceptible, se está despertando la sensibilidad del lector, su capacidad crítica, enriqueciendo su vocabulario,
mostrándole las diferentes formas de expresión; el lector está  adquiriendo conocimientos geográficos, históricos, matemáticos, plásticos, religiosos…;aprendiendo a escribir (ortografía, sintaxis, puntuaciones, figuras literarias…); perfeccionando su capacidad comprensiva, de síntesis, de análisis; ejercitando su facultad de imaginar, de recrear la realidad… 
En definitiva cuando se lee un libro, suele haber, además de gozo, un enriquecimiento integral del lector